La idea de realizar este proyecto me cayó ya con un territorio casi definido: el mundo eslavo. Inmediatamente me asaltó una trisyuntiva: incluír en este mundo eslavo a las repúblicas que conformaron la Unión Soviética; circunscribirme a los países eslavos periféricos que conformaron el Pacto de Varsovia; o reducir el territorio al difuso mundo de los Balcanes.
Lo que era seguro desde el principio, era que la unidad última la ofrecería la lengua española. De ahí la primera enunciación a la que he llegado del concepto y que ayuda a escalrecer el título del presente espacio: "UN ESPACIO COLECTIVO PARA VIVIR EL MUNDO ESLAVO A TRAVÉS DEL ESPAÑOL, Y PARA GOZAR LAS ARTES Y LAS LETRAS DE AMÉRICA LATINA A TRAVÉS DEL PENSAMIENTO ESLAVO"
Ahora, mientras la construcción del sitio se lleva a cabo, quiero conformar a través de este blog un consejo editorial que participe en la creación de la revista desde sus inicios.
Si has recibido una invitación, regístrate como integrante; y si además, tienes el suficiente entusiasmo, presentate a los demás a través de un post.
Gracias.
Hola malabaristas!
ResponderBorrarsaludos de una Montevideo oculta tras la neblina. Buenaventura, Carlos, con este proyecto precioso. Seguro, será numerosa la constelación de amigas y amigos de mundos distantes reunidos en este espacio como barriletes en un mismo cielo.
Aquí nos veremos.
Salud! živili!
Bienvenida, Vesna. Se ve que les hemos enviado la niebla; ahora aquí amanece soleado. Veremos en que depara la aventura. Mientras, celebro la compañía.
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